martes, 2 de agosto de 2011

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Hay ciertas personas que de pronto entran en tu vida de forma inesperada y que al conocerlas mejor sientes un vértigo impresionante por su profundidad. Son personas excepcionales, que te hacen cuestionarte todo lo que dabas por asentado. Son personas que crean adicción, uno siempre quiere pasar más y más tiempo con ellas. Son personas dignas de admiración, de la tuya en concreto. Son personas de las uno honestamente quiere ser un buen amigo. La empatía es total. Un tiene la sensación de que pueden comprenderle, escucharle a uno mucho mejor que la mayoría. Uno está embriagado de sensaciones espectaculares. Los momentos compartidos son tesoros, mucho más valiosos que cualquier joya.

Sin embargo la vida por extrañas razones toma sus caminos y esas personas ya no forman parte del día a día. Son extraños en la vida real y fantasmas en el recuerdo. A veces es incluso doloroso pensar en ellas. Se mezclan el rencor y la resignación. ¿Por qué tuvo que acabar si era tan bueno? ¿Cuándo se redujo esa potente llama a meras cenizas?¿ Será que NADA es para siempre, de ahí su magia?

A esas personas les dedico ésto.

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